Evangelio según San Marcos

Al tener en las manos el libro, que fue de mi mamá y uno de mis hermanos conservó, recordé que cuando estaba en la preparatoria (muchos años ha), leì todo el nuevo testamento, mas por curiosidad que por algún tipo de obligación, ya que escuché o leí en alguna parte, que debía leerse entre líneas. Entonces no lo entendí, no sabía que es lo que debía de encontrar y sólo me quedé con la narrativa, la cual tenía asociada a las películas que pasan en Semana Santa, sí, esas de Enrique Rambal en las que recita las palabras como si se tratara de una función de escuela: no tenían para mi mayor significado que la asociación con las clases de doctrina y el “deber” de seguir las enseñanzas que mi mamá recitaba también, más por fe que por entendimiento real.

Esta nueva lectura me llevó a reflexionar respecto de la semejanza de algunas palabras puestas en boca de Jesús, respecto de las acciones que describe San Marcos, con lo que he estado aprehendiendo del enfoque transpersonal.

Los pasajes que más me impactaron, fueron los siguientes:

Después de que Jesús es bautizado (purificado) y tentado por Satanás en el desierto, sin haber caído en la tentación, inicia su vida pública realizando actos que parecen maravillosos en virtud de estar enfocados a la sanación de las personas. Cada una de sus intervenciones se acompaña de una enseñanza.

Jesús sana a un paralítico

2.8. Y conociendo luego Jesús en su espíritu que cavilaban de esta manera dentro de sí mismos les dijo: ¿por qué cavilais así en vuestros corazones?.
2.9 ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: tus pecados te son perdonados o decirle: Levántate, toma tu lecho y anda?

Jesús, a mi parecer, ayuda al paralítico para enfocar su energía al hecho de caminar, ya que una vez que Jesús dice tales palabras a sus discípulos, le dice al paralítico que se levante y camina, y el paralítico camina.

Este, como muchos otros de los milagros narrados en este evangelio, tiene mucho que ver con las explicaciones de los investigadores de la física cuántica y la metafísica, algunos de los cuales exponen sus puntos de vista en la película de ¿Y tú que %·$ sabes?: los pensamientos son energía pura que trabajan a favor o en contra de nosotros.

En otro de los pasajes:

La blasfemia contra el Espíritu Santo

3.24 Si un reino está dividido contra sí mismo, tal reino no puede permanecer.
3.25 Y si una casa está dividida contra sí misma, tal casa no puede permanecer.
3.26 Y si Satanás se levanta contra sí mismo y se divide, no puede permanecer, sino que ha llegado a su fin.
3.27 Ninguno puede entrar a la casa de un hombre y saquear sus bienes, si antes no le ata, y entonces podrá saquear su casa
3.28 De cierto os digo que todos los pecados será perdonados a los hijos de los hombres y las blasfemias cualquiera que sean;
3.29 pero alguien que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.

En este caso, me parece que se refiere al hombre mismo y a su sombra. Aquella persona que está atada a su sombra, deja que todo lo externo le afecte y se divide y la división le lleva al sufrimiento eterno ya que se niega la oportunidad de trascender y alcanzar su espíritu.

Esto se complementa en el pasaje de:

Lo que contamina al hombre

7.15 Nada hay fuera del hombre que entre en él que le pueda contaminar; pero lo que sale de él, eso es lo que contamina al hombre.
……..
7.18……..¿no entendéis que todo lo de fuera que entra al hombre, no le puede contaminar?
7.19 porque no entra en su corazón, sino en el vientre, y sale a la letrina?
………
7.21 Porque de dentro, , del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios,
7.22 los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia la maledicencia, la soberbia, la insensatez.
7.23 Todas estas maldades de dentro sales y contaminan al hombre.

Lo que las personas dejan entrara su sombra es lo que muestran a quienes les rodean, dando origen a todas las problemáticas sociales: abuso de toda índole, corrupción, violencia, adicciones, entre otros males.

Posteriormente, en las parábolas de la Alimentación a los cinco mil y la de La levadura de los fariseos, se encuentra el principio multiplicador de que de todo aquello que compartes siempre vas a recuperar una parte, lo cual para mi significa que cualquier pensamiento, pasión, emoción, sentimiento que se comparte hacia los otros, no solo va a multiplicarse para que cada quien se quede con algo, sino que una parte de éste va a regresar a quien lo compartió lo cual, por supuesto, tiene mucho que ver con la plaga emocional que describe Wilhem Reich.

Todas las enseñanzas tienen que ver con la unidad del ser, con su crecimiento y con la purificación del espíritu a través de prácticas del reconocimiento de la sombra y del cambio de estructuras de comportamiento basadas en la toma de decisiones asertivas que conllevan el respeto a sí mismo y a los otros, así como el ejercicio de las actitudes básicas de las que habla Carl Rogers.

Porque ahora sé que dar la otra mejilla, no significa darle al otro la oportunidad de golpearme de nuevo, sino de mostrarle la parte de mi que no ha sido golpeada por la vida, la parte de mi que se encuentra limpia, radiante, sin humillación externa, y que, si permito que alguien externo me destruya a mi que soy mi templo, siempre podré reconstruirme, ya que a través de convertirme en pescador de sueños, ilusiones y sobre todo experiencias, conjuntaré y seleccionaré los elementos que me permitan fortalecerme y trascender.